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jueves, 8 de octubre de 2015

Chobits: manga freak, historia aun más freak

Viendo en retrospectiva la década de los "2,000", debo decir que el primer lustro de aquellos años me maltrato y mucho en todos sentidos: penurias económicas, físicas y emocionales en todos sentidos. Tampoco voy a negar que el 90% de esas cuestiones yo las provoque solito y que hubiera evitado muchos problemas, si hubiese sido mucho más centrado y no un vil adolescente. Esto demuestra que uno tiene que vivir su vida de acuerdo al tramo en que estamos, sino, corremos el riesgo de batallar y llegar a madurar de malas maneras. Tal vez es la razón por la cual en mi trabajo soy capaz de darle unos buenos zapes a los adolescentes. Un servidor apenas esta saliendo de esa etapa (pobre de mi esposa, jeje).

Sin embargo, sí algo me sorprende de aquellos años, es que logre sobrevivir con casi nada en los bolsillos y aun así, logre hacer varias cosas, entre ellas, comprar mangas. Claro, los 22 a 50 pesos que costaban los tomos en aquellos años eran una mirruña, comparado con hoy en día, donde los mangas de Panini están en 69 morlacos y los de Kamite, en 90 pesotes. Pero bueno, sí un mérito tengo, es que siempre he sabido ahorrar de una manera u otra (a riesgo de comer bien) y por ello, logre adquirir series completas. Claro, en mi estupidez, las termine regalando y ahora apenas ando reconstruyendo mi imperio a base de hacerle ojitos a mi mujer.

Aun así, hay series que aunque me dieran la oportunidad de comprarlas al mismo precio, no volvería a hacerlo. Claro, tal vez regaladas sí, pero comprarlas, ni loco. No es porque su arte sea malo, mucho menos su historia, sino porque la dirección de la trama jamás llego a ser de mi agrado. Sí, hablamos de esa archireconocida franquicia de las CLAMP: Chobits.


Detalles técnicos: "Chobits" fue el decimosexto manga creado por las CLAMP (Mokona, antes Mokona Apapa, Ageha Ohkawa, antes Nanase Ohkawa, Tsubaki Nekoi, antes Mick Nekoi y Satsuki Igarashi) y que fue la sucesora de "Angelic Layer". Editado por la Kodansha en su Young Magazine y duro entre febrero del 2001 hasta noviembre del 2002. Recopilo 8 tomos y el éxito de la serie inspiró un anime que tuvo la duración de 24 episodios, los cuales se emitieron en la temporada de primavera y verano del 2002.

Las características del manga, es que fue la segunda de las historias dibujadas por Satsuki Igarashi y que ya sustituiría definitivamente a Mokona Apapa en la cuestión de arte. En otra, es que "Chobits" se considera la continuación de Angelic Layer, no solo por ciertos elementos en la historia, sino por el grado de madurez y el tipo de público para el cual estaba dirigido. Mientras Angelic Layer era un manga shonen para chicos y chicas adolescentes, Chobits sería dirigido para audiencias más maduras y teniendo ya tonos subidos de tono, con ligero erotismo y algo de ecchi.

Argumento: en un futuro cercano, Hideki Motosuwa es un chico campirano que ha reprobado el examen de ingreso a la Universidad, por lo cual, decide irse a vivir a Tokio, mientras estudia y trabaja para intentarlo nuevamente. Allí es cuando conoce a las dichosas "persocon", una suerte de androides que sirven de apoyo y consuelo a sus compradores. Luego de trabajar en un restaurante como camarero, un día que regresaba de la chamba, se encuentra una "persocom" abandonada en un tiradero. Intrigado, se la lleva a casa, pero no haya el modo de activarla, hasta que se le ocurre hacerlo por cierta parte íntima. Al encender, la susodicha persocon solo atina a decir "Chii", por lo cual Hideki decide bautizarla de tal manera. Conforme pasa el tiempo con su nueva persocon, Hideki se ira metiendo en el mundo de estos androides y como estos han cambiado la perspectiva de la humanidad.


Comentario: "Chobits" fue de los primeros mangas de Editorial Vid que logre conseguir de manera integra. Curiosamente, la serie de anime se emitió primero en México, bueno, no de manera legal, ya que para el 2003-2004, era fácil conseguirla en cualquier puesto pirata. Por supuesto, en aquel entonces, me chute los primeros 6 a 7 episodios, y debo decir que me impresionaron de sobremanera, ya que Clamp parecía haber vuelto al redil con las historias de tipo "seinen".

Aunque la trama o el axis es meramente romántico (Hideki se va enamorando de Chii y esta va desarrollando sentimientos por el susodicho), el contexto por momentos llegaba a ser muy denso y en cierta manera, bastante "Asimov", ya que mediante los ojos del protagonista, vamos viendo que la existencia de las persocon revoluciono el mundo en muchos sentidos. Las relaciones humanas pasaron de ser algo normal a enfríarse de manera brutal, debido a la existencia de dichos androides, que podían satisfacer gustos y placeres, sin necesidad de molestarse o haber siquiera un intercambio de ideas o pensamientos. Justamente una de las subtramas toca a una joven que ve perdido su matrimonio en el momento que la persocon de su esposo se obsesiono con ella.

Aparte, también observamos como estas llegan a ser un sustituto sencillo de muchos sentimientos o relaciones, al grado de trastornar o cambiar a la persona que tenemos enfrente o a lado. Esto fue lo que me dejo emocionado con la trama y justamente me hizo comprarme el manga en primer lugar (ya que el anime lo termine viendo hace pocos años). Sin embargo, debo decir que esto se convirtió en el mejor acierto, pero también en lo más horrendo de la serie.

Sí, el manga (así el anime) empieza potente, ya que se aleja del canon romántico y las subtramas resultan ser mucho más emocionantes y profundas. Sin embargo, conforme avanza la historia, caemos en un romanticismo bastante clásico y trágico: Chii resulta ser una nueva clase de persocon que va a revolucionar el mundo y que lógico, junto a su hermana gemela Freya, fueron creadas por Ichiro Mihara (sep, el profesor loco de Angelic Layer). En el momento en que entramos en esta cuestión, es cuando el manga se va a pique, ya que la complejidad de los personajes es dejada de lado y todo se centra en la relación entre Hideki y Chii.

No es que ambos personajes sean malos, al contrario, Chii pese a su escaso repertorio hablado, es sumamente linda y carismática (de allí que el personaje haya sido un ícono a mediados de la década pasada), pero su historia es sumamente cliché y cuando ya estaba hojeando el tomo 7, solo apretaba los dientes, ya que veía para donde iba a caer la historia. Para colmo, no es que el final haya sido malo, es bastante resolutivo. El detalle es que ES DEMASIADO conclusivo y para colmo, desabrido. Sin pelos en la lengua, Chii tiene su botón de activación en la vagina y por obvias razones, quien quiera tener relaciones con ella, podría activar dicho botón y resetear las memorias así recuerdos previos. La historia hace hincapié en el "amor puro" y por ello, quien ame a Chii, también debera hacerlo a modo platónico, sin amor carnal de por medio.

Sí, suena bonito a primera cuenta, pero si lo razonamos más, suena horrendo. Inclusive mi esposa, también llego a opinar lo mismo (fue de las cosas que me comenzaron a gustar de ella cuando comenzamos a salir, ya que hablabamos de esta franquicia) y que el final parecía demasiado chafa, luego de la complejidad que había manejado.

Pero no todo es malo. El aspecto técnico y dibujo es precioso y como comenté, las subtramas, que involucran a los personajes secundarios son divertidas, amenas y con un buen trasfondo: el amigo de Hideki que se enamora de su profesora, el chico millonario que recreo a su hermana en su persocon o el jefe de Hideki que esta enamorada de la amiga del mismo. En su momento me agradaban más estas historias que la de los protagonistas, lo cual es una lástima que no las continuaran de mejor forma.

En lo curioso, sí, está podría ser una continuación de Angelic Layer. La primera es con el profesor Mihara que aquí aparece como el creador de Chii junto con su esposa (y casera de Hideki), así también como el chico rico, Minoru, resulta ser hermano de una rival de Misaki en la mencionada Angelic Layer. Aquí es cuando vemos el intento de CLAMP de restaurar sus viejos crossovers (que ya habíamos visto en Tokyo Babylon y en X 1999), aunque con poco éxito.

A opinión personal: ¿Chobits me gusta? No. Realmente no. Es que sinceramente, esperaba algo mejor y más desarrollado. Por momentos el manga alcanza unas cuotas de madurez y profundidas muy altas, pero en lugar de manejarlas, las dejan de lado y ese lado "seinen" se pierde en pro de ciertos cliches que resultan muy forzados, entre ellos, el final.

Por esto, aunque regale la serie, está sería de las que menos quisiera de vuelta. Valió la pena el gasto, pero volverla a tener, para nada. Y es curioso, porque muchos en su momento, encumbraron la franquicia, en especial el anime, por su diseño (el cual es mucho mejor que Angelic Layer) y sus personajes. Sin embargo, me pareció por momentos cruda y con poco punch.


Edición mexicana: como ya se comentó, Chobits fue traído por Editorial Vid en el 2005. Sin embargo, mientras en Japón, Angelic Layer vino primero, aquí fue al revés, siendo Chobits la primera en ser editada en México y luego su predecesora. Por momentos pensé en no comprarla, ya que este fue de los mangas que mostró el incremento a 50 pesos, aunque curiosamente, el último tomo costó 5 morlacos menos.

En conclusión, "Chobits" es de esos mangas típicos de CLAMP: romance, drama, comedia, algo de erotismo. Sin embargo, no es tan redonda como otras series y queda en un "intermedio" bastante patente, en especial en su final, donde el querer resolucionar las cosas en una especie de enseñanza, resulta ser muy sosa. Como dije, pese al dibujo que no niego que es formidable, no lo tendría, salvo sí fuese regalado jeje (cosa que repito, mi esposa esta totalmente de acuerdo).

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Saludos a mi mujer ^^, así a quienes gustan de este tipo de mangas.

lunes, 2 de febrero de 2015

Angelic Layer: un manga shonen de las CLAMP



Pese a que Angelic Layer se considera una de las obras menores del grupo CLAMP, tanto en extensión como por el recuerdo que le tienen los fans, en mi caso, represento un antes y después especialmente en el ámbito emocional. Aunque hoy en día, la serie que involucra el manga y anime, me trae buenos recuerdos, en su momento no fue tanto así y cada vez que veía o escucha el opening o ending, un saborcillo amargo me venía a la boca.

Pero bueno, en este caso, hablaremos un tanto de la misma (en la sección de mangas), no tanto por su trascendencia, sino por mero gusto. Curiosamente, Angelic Layer tuvo presencia en nuestro país en este formato y aunque su popularidad no fue tanta, su corta duración permitió a más de un fan conocer de la misma. Aparte, en Japón tuvo un éxito importante, al grado que se hizo una serie animada de la misma y de la cual, espero hablar en una entrada próxima.

Angelic Layer (機動天使エンジェリックレイヤー Kidou Tenshi Engerikku Reiyā?) es un manga escrito e ilustrado por CLAMP, publicado en Japón por Kadokawa Shoten

El manga fue adaptado en una serie de anime producida por BONES que se emitió en TV Tokyo el 1 de abril del 2001 hasta el 23 de septiembre del 2001 constando de 26 episodios.


Angelic Layer, en manga, vio la luz en la revista Shonen Ace de la Editorial Kadokawa, en julio de 1999 y se extendió por dos años, hasta que finalizo en octubre del 2001, teniendo 5 tomos recopilatorios. El manga tuvo una buena recepción, especialmente por el tipo (siendo una serie shonen, con ciertas salpicaduras de shoujo) y porque se considera una “precuela”, del exitoso manga “Chobits”, ambos dibujados y guionizados por el grupo CLAMP.

Con esta serie y la mencionada Chobits, las CLAMP comenzaron a variar de manera drástica su dibujo y también los guiones, pasando de series netamente shoujo a mostrarnos algo mucho más complejo o mixto. Amén de que Mokona Apapa, debido a problemas físicos, comenzó a delegar más sus responsabilidades en Satsuki Igarashi, que entonces solo se encargaba de dirigir el grupo y que apoyaba a la propia Apapa en las cuestiones de trazo.

Como sea, Angelic Layer cosechó buenos éxitos y eso permitió que en la temporada de primavera del 2001, en abril, se estrenara el anime, por parte del estudio BONES, que duro 26 episodios y que termino en septiembre del 2001. Debido a esto, el final de ambas obras diferiría en algunos puntos, los cuales trataré más adelante.

El argumento tiene su encanto: Misaki Suzuhara es una chica proveniente del interior de Japón y ha sido educada por sus abuelos. Por lo tanto, sus modales y forma de referirse a los demás, la hace ser una chica adorable y bien educada. Debido a los problemas de salud de sus abuelos, decide mudarse a la urbe, donde se hospedará con su tía, hermana de su desaparecida madre (en al anime, la señora tuvo que irse por una esclerosis múltiple, mientras en el manga, su enfermedad no era tan grave, pero se involucró tanto con un programa novedoso que dejo de lado a su hija. Seh, extraña excusa). En el camino, lógico, se pierde y en una de las enormes pantallas, ve una pelea sensacional entre dos muñecas robóticas de última generación, llamadas “angelic layers”. Mientras esto sucede, un acosador, léase, Icchan, la ve de reojo y al notar su fascinación por ese mundillo, la lleva a una tienda para que compre todo lo necesario para tener su propia muñeca. Ya luego de varias peripecias, llega a casa de su tía y comienza a personalizar su muñeca, llamándola Hikaru. Posteriormente, gracias a sus amigos del Instituto Eriol (¿?) donde va Misaki, esta comienza a interesarse más en ese mundo al grado de participar en el torneo nacional de Angelic Layer, el cual aparte le permitirá volver a ver a su madre.

Como ven, el manga, pese a sus trazos bonitos y peculiares, es meramente un shonen. Misaki es la protagonista que debe vencer rivales más poderosos, no solo en base a las habilidades de su muñeca (la cual tiene un parecido asombroso con Hikaru de Rayearth), sino también con el uso de la inteligencia e ir conociendo los puntos débiles de sus rivales. Por supuesto, Misaki se revela como un talento “en bruto”, no porque saque algún poder en especial, sino por la capacidad de mimetizarse con lo de alrededor y adoptar técnicas o poderes de sus competidoras, para usarlos con las que posteriormente se enfrentará. Por supuesto, al ser un shonen, los rivales son harto carismáticos y tienen su carisma. Va desde la “mejor” amiga que tiene un Angelic Layer bastante poderoso (y muy nipon), hasta aquellos que oscilan entre lo tierno y atractivo, hasta ser un dolor de cabeza, por tener un poder en especial o una habilidad casi sobrehumana. Por supuesto, se hace ver que la madre de Misaki es el “boss” final y que aparte tiene un “subjefe”, encarnado en el simpático hermano de Icchan (y que resulta ser el desarrollador de toda esta tecnología), llamado Oujiro. Este personaje se convierte en el rival, pero a la vez amigo de la misma protagonista.

Si a esto agregamos a los secundarios, no combatientes, como Kotaro y Tamayo, mejores amigos desde la infancia y que luego se vuelven el principal apoyo de Misaki, hacen que el manga sea bastante entretenido. Un punto a favor de esta obra es su sencillez (pese a tener un trazo elaborado y unas batallas espectaculares), ya que no busca enseñarnos algo ni que nos cortemos las venas por alguna situación dramática. Las CLAMP hacen una obra amena, divertida, de mucha acción y batallas, muuuuyshonen, lo cual se agradece y provoca que los 5 tomos se vayan volando mientras uno los está leyendo.

Ahora, el manga es reconocido entre los fans de las CLAMP por dos detalles ya mencionados: el primero es que una serie “precuela” de Chobits. Icchan resulta ser el creador de Chii (y su gemela), mientras que Kaede, una de las participantes del torneo, es la hermana mayor de Minoru, uno de los personajes secundarios del mencionado manga. También, las autoras recurrieron a reciclar viejos diseños y utilizarlos, como el caso de Hikaru de Guerreras Mágicas, Kamui de X o Tomoyo de Sakura Card Captor. También se hace mención a nombres de otros personajes, como el caso de Eriol o de la deformación del nombre Tomoyo a Tamayo. Aparte, la tienda Piffle Princess (donde Misaki compra a Hikaru), es una tienda recurrente en varias obras de CLAMP, como en Sakura Card Captor o Tsubasa Chronicles. Posteriormente, muchos elementos de Angelic Layer, también pasarían a otros mangas, en especial a Kobato.

Ahora ¿Por qué el manga tiene una connotación especial para un servidor? La razón se remonta a las emisiones de Card Captor Sakura. Sabemos que esta serie la rompió en su momento y que muy popular, no solo en el sexo masculino, sino sobre todo en el femenino. Aunque había escuchado de la serie, gracias a las amigas y a la novia que tenía en aquel tiempo, fue cuando llego el 2003, cuando por una pareja, conocí la serie en formato anime. Claro, hablamos del auge de la piratería. No voy a meterme en un dilema moral ahora, pero debo decir que en aquellos tiempos, no la apoyaba en absoluto. Me parecía insulso comprar CD o DVD en bolsitas o cajitas improvisadas. Esperaba con cierta esperanza y fe que algún día vería esos animes en TV. Claro, ahora las generaciones actuales y también varias de las antiguas como la de un servidor, pueden surtirse de buenas opciones que hay en el mercado, como el streaming o comprar en tiendas que ya comienzan a especializarse en el anime. Inclusive, pueden pregonan a los 4 vientos, que compremos anime legal y que apoyemos la industria.

Pero seamos honestos. En aquellos tiempos, si tenías que recurrir a la piratería de un modo u otro. No podías esperar a que los canales, sea privados o abiertos, emitieran algo del anime que se veía en Japón. Para colmo, algo que alimento mis reservas, en especial con este manga y anime, fue que hubo un rumor muy fuerte de que el anime había sido doblado en México y que está próximo a emitirse. Una total mentira. Finalmente, gracias a la insistencia de mí entonces pareja, compré los DVD pirata y allí cambio todo. Desde entonces, sí, compro anime cuando puedo, pero me apoyo más en los fansubs para ver los animes más actuales.

Por suerte, el manga si fue algo que compré por la vía legal, ya que Editorial VID decidió traerlo a México, en el año 2005, de manera íntegra, conteniendo aparte varios omakes, o historias cortas, protagonizadas por Ogata, el asistente de Icchan o la misma Misaki, esto en los tomos 3 y 4. Actualmente y de forma lamentablemente, el manga no está en mis manos, ya que lo termine regalando por motivos cursis (lo cual no recomiendo, ya que uno puede arrepentirse). Sin embargo, en el momento que lo leí, me pareció harto divertido y entretenido, como ya he comentado, aunque para esos lares, el anime lo había visto y vi algunos detalles curiosos.

Para empezar, el manga y anime difieren en el final y en cierta trama. Mientras el manga es meramente un relato de acción, el anime tiene un tanto más de drama (aparte de incluir dos personajes nuevos) y se enfoca en la relación entre Misaki y su madre. Otro detalle curiosísimo y que me agrado a la vez, fue la diferencia de parejas. En el anime, Kotaro y Tamayo se vuelven pareja (lo cual se va insinuando levemente) y la sorpresa es que Misaki y Oujiro comienzan a salir (lo cual si había cierto “pegue”, pero muuuy leve). En el manga, es al revés: la relación de Kotaro y Misaki se va desarrollando lentamente y alcanza su cénit en el tomo 4, donde hay una fuerte atracción entre los dos, mientras Oujiro es técnicamente un cero a la izquierda. Sin embargo, oh sorpresa, en el epílogo, resulta que Tamayo y él se hicieron novios, a raíz de un encuentro que tuvieron en el estadio donde peleaban las muñecas. Esta pareja si me saco de onda, pero a la vez me pareció muy original y hasta en su momento, pensé en varios fics para explicar cómo se hicieron novios.

En conclusión, “Angelic Layer” es una serie divertida, amena, pero sobre todo, sobria y sencilla. Luego del terrible trauma que las CLAMP me hicieron pasar con Chobits o X, necesitaba algo más fresco y tranquilo, lo cual vino a recaer en este manga. Es bastante recomendable para quienes han empezado en el negocio del manga y una buena apuesta para empaparse del universo CLAMP que luego irían popularizando con Tsubasa Cronicles. En México, pese a la extinción de Editorial VID, aun se puede conseguir en tiendas especializadas o en los famosos estanquillos que hay en las diferentes frikie-plazas de la City o del país. Un servidor espera conseguirla nuevamente (cuando la situación económica mejore) y así mostrarle uno de los mejores mangas que ha pasado por el país.

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Saludos a mi princesa :3, así a quienes gustan de este tipo de mangas.