Lógico, empezamos con el partido inaugural, Brasil vs. Croacia.
Los mexicanos teníamos un interés especial en este partido, porque estar encuadrados en el mismo grupo con estos dos, da lugar a muchas combinaciones, pero sobre toda la más importante: alguien debe ganar y por goleada.
¿Y por qué? El criterio de desempate luego de los puntos logrados (3 por victoria, 1 por empate, ninguno por derrota) es la diferencia de goles (que se saca entre los metidos y los recibidos). Esa misma diferencia nos ha salvado para calificar y por ello, siendo el favorito Brasil, todo México estaba inclinado a las tropas cariocas. Si Croacia era goleado, México llegaría con un rival más debilitado en la diferencia y posibilitaría jugar con el resultado.
Pero aun antes de iniciar el partido, las cosas jamás habían sido fáciles para Brasil. Ya queda poco de ese equipo lleno de talento, de brillantez, sino la mayoría son jugadores de un talento físico innegable, hasta brutal (hay que ver al buen Hulk), pero no con ese chispazo o descaro de otras selecciones brasileñas. Por lo tanto, aparte de las dichosas protestas porque pocos en Brasil querían un Mundial (solo los ricos y la misma FIFA, ni se diga la presidenta brasileña), la selección brasileña no era la graaan favorita, no al menos como en 1950.
Para remate, Croacia tampoco era un flan. Su media cancha (Rakitic, Kovac, etc.) esta integrada por jugadores que han brillado intensamente en la última jornada de Europa.
Con este preámbulo y luego de una inauguración corta, pero colorida, comenzó el partido inaugural de la XX Copa Mundial, en la Arena de Sao Paulo.
Debo decir que llegue corriendo al partido, arrastrando a mi pobre esposa, ya que habíamos ido a hacer unas diligencias a la City y ya luego, con la comida en mano, nos pusimos a ver el encuentro.
Pero Neymar, con ese talento y ese desparpajo que le caracteriza, puso el 1 a 1 al 29. El primer tiempo termino con un Brasil mejor y un Croacia desanimado por el tanto.
Al inicio del segundo tiempo, Croacia volvió a asomar las narices y puso en aprietos a la defensa brasileña. Pero en un contrataque, el arbitro Nishimura marco penal a favor de Brasil. Fue una jugada, que sinceramente, no era penal, pero en el sentido rigorista sí. Sabemos que el anfitrión va a estar favorecido, así que no nos hagamos.
Lo peor llego cuando Pletikosa, el portero croata estuvo a punto de pararlo. Pero tanto con el anterior tanto brasileño, como el que seguiría, se nota que el portero no es bueno atajando a corta distancia y por debajo y fuerte.
Sep, hubo un tercer gol de Brasil, pero luego de que Croacia se fue como fiera herida al frente. Julio César, el portero brasileiro no las veía venir con tanto cañonazo helvético que hacía sudar a los espectadores y al mismo equipo carioca.
Pero en un contragolpe, luego de una dudosa falta brasileña, Óscar condujo y disparo, anotando el tercero con un certero punterazo.
Así termino el encuentro, donde se cumplió el pronóstico y Brasil gano a Croacia, no de manera contundente ni bonita, sino más con la famosa suerte del "Campeón" (y ojala se le apague en el partido contra México).
Ahora a lo bueno, México ve "positivo" este encuentro, porque Croacia en el siguiente encuentro medirá fuerzas contra los cameruneses. Si lograsemos una victoria o un empate mínimo, dejar que croatas y cameruneses se maten es buena opción. Por lo menos, la diferencia de goles ya esta en contra de los croatas.
Curioso. Si México llegase a ganar, una victoria de los africanos contra los europeos, dejaría ya fuera a los croatas y a los mexicanos con mejores posibilidades, aun pese a perder con Brasil, ya que estos llegarían fuertes contra los leones indomables. A ver que sucede.
Mañana, el análisis más crudo o más festivo, dependiendo del resultado. No puedo evitarlo, soy un aficionado más ahora.
Saludos a mi esposa, que apenas aguanto el primer tiempo y luego se puso a hacer otras cosas para el segundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario