Siendo sinceros, pese a que soy un buen lector, en realidad siempre escojo libros sencillos para leer, donde la narrativa o el estilo del autor sean lo suficientemente fluidos para chutarme un libro en un tiempo corto. Primero, por gusto, segundo por comodidad y tercero por compatibilidad. Por ello, cuando estaba frente al estante en una librería bastante conocida, donde se veía el libro "Marte Rojo" de Kim Stanley Robinson, me lo dude por un instante.
"Marte Rojo" era un libro que había estado siguiendo por mucho tiempo, más cuando leí críticas altamente positivas del susodicho, no solo por ser un libro de ciencia ficción, sino también porque toca uno de los temas que más me apasionan, que es la colonización marciana. Cuando estaba en secundaria, el profesor de español nos pidió de entrada un libro que fue el de base para todo el año. En el susodicho había reseñas y en especial un "artículo" que hablaba de los planes de la presidencia Reagan para no solo explorar, sino colonizar el planeta rojo. Tal vez allí fue cuando nació mi gusto por la astronomía y los viajes espaciales.
Por ello, en su momento comencé a ahorrar para comprar el susodicho, ya que estaba bastante caro. Sin embargo, no sé porque leí reseñas al respecto y pues casi estuve a punto de arrepentirme (aunado a mi lastimado codo), ya que estas ponían a la novela en un nivel de ciencia ficción pura y dura. Lo cual implicaba chutarse casi un libraco de mis épocas de estudiante. Claro, en otro momento lo hubiera visto como un reto, pero en ese instante, la cosa era bastante distinta. Pese a todo y este trabuco emocional que duro casi media hora, finalmente me compre el primero de la trilogía marciana. Y debo decir que casi estoy de acuerdo con las reseñas que leí. Vamos a ver porque.
Marte rojo es la primera parte de la Trilogía marciana de Kim Stanley Robinson; una novela de ciencia ficción ganadora del premio Nébula y del British Science Fiction Award, y elogiada por Arthur C. Clarke como la mejor novela sobre la colonización de Marte jamás escrita.1
La novela narra la historia de los primeros 35 años de vida humana en Marte, desde 2026 hasta 2061; la historia seguirá en Marte verde, y posteriormente en Marte azul, abarcando en estos dos libros, el período posterior a 2061. Esta historia se relata desde los ojos de algunos de los integrantes del primer grupo que pisara la superficie del planeta rojo con intención de quedarse, compuesto por cien personas de distintos países (en especial estadounidenses y rusos, pero también algún japonés, español, e incluso jamaicano). Este grupo se denomina en el libro "Los Primeros Cien" y entre ellos está también el primer hombre que pisara Marte, John Boone.
El libro está dividido en ocho partes, cada una de las cuales está contada desde el punto de vista de uno de "Los Primeros Cien", centrándose especialmente en sus acciones, sentimientos e ideologías contrapuestas.
Antes que nada, como siempre, hablemos del autor: Kim Stanley Robinson.
Este autor, de origen norteamericano, nació en 1952 en Illinois. Sin embargo, desde pequeño se mudo con su familia a California, donde estudio en la Universidad de California, donde estudio literatura. Comenzó su gustillo por la escritura, cuando trabajaba en una tienda de libros, mientras pagaba sus estudios. Su tesis de doctorado la hizo en base a los escritos de Philip K. Dick. Justamente, su primera novela sobre ciencia ficción la hizo en base a uno de los tantos universos y estilos que uso dicho autor en vida, esto para 1984.
Su más grande obra es la famosa trilogía marciana (Marte Rojo, Marte Azul, Marte Verde), las cuales fueron publicadas entre 1992 y 1996, ganando un sinfín de premios con ellas, entre estos, el Nébula, el Hugo, el Ignotus y el Locus, siendo de los pocos escritores que han tenido estos galardones.
Justamente, "Marte Rojo" le hizo ganador del Premio Nébula esto en 1992. Por cierto, ¿De qué va el libro?
Este primer tomo de la trilogía marciana se enfoca en la colonización del planeta Marte por 100 científicos de distintas características y nacionalidades. Narra desde la selección de los participantes, su viaje en la nave Ares y su posterior establecimiento en el planeta rojo. Rápidamente el choque de mentalidades y formas de ser comienzan a provocar problemas entre los "Primeros Cien" (como son nombrados posteriormente) y se dividen en dos facciones: los que desean preservar Marte tal y como está, así los que desean terraformarlo para hacerlo habitable. Sin embargo, esto se ve enturbiado cuando las transnacionales amenazan con una guerra mundial cuando sus intereses se ven perjudicados.
Con esta primicia, uno podría decir que es un novelon de aquellos, ya que no solo involucra la colonización marciana y sus detalles más ínfimos, sino también una trama tanto política como económica que encaja perfectamente en nuestros días. El problema, viene a ser la la forma en que el autor describe estos hechos, lo cual es por momentos infumable. Así de sencillo. Pero antes de hacer la crítica, voy a dividir ello en dos aspectos.
Fondo: la minuciosidad, los detalles técnicos, la gran cantidad de datos, el manejo de los personajes a nivel psicológico y la forma de retratar no solo el viaje, sino la colonización como el desarrollo de la primera sociedad marciana es formidable, avasallador. En muchos comentarios del libro, comentan que el autor bien pudo haber sido uno de los colonizadores sin problemas. No en vano, Stanley Robinson se documento por 15 años para hacer la trilogía. Los resultados son bastante patentes. Esto es lo mejor del libro, ya que a uno lo deja maravillado la cantidad de cosas y detalles que se enumeran y que muchos llegan a pasar por alto. Desde la forma de obtener energía, el tipo de habitación más adecuada para el clima marciano, hasta el shock que sufren algunos de los "Primeros Cien" a su llegada y posterior estadía en el planeta (de lo cual me sorprendió mucho el psiquiatra del grupo, un francés que se vuelve bastante nostálgico y que comienza a errar debido a esto).
Estos datos, que hacen a la novela como una auténtica obra de ciencia ficción dura, se vuelven mucho más intensos en el segundo tercio de la historia. Lo interesante es como el autor logra afianzar un dato en cierto punto y lo retoma en el otro, lo cual hace que uno tenga que estar pendiente de cada detalle. En ocasiones me ponía a escribir o garabatear datos y nombres, para no perderme en la trama. Sin embargo, esto siento que le daba un aire mucho más potente y continuista. Inclusive, algunas discusiones son retomadas en varias ocasiones, lo cual da lugar a debates harto apasionados, en especial entre la fracción verde (la que desea terraformar) y la roja (la que desea mantener el planeta tal y como es).
Lo mejor viene con el último tercio del libro, donde aparte de la cuestión filosófica y personal, ahora nos vamos a lo económico y cultural, lo cual crea una cisma entre las naciones participantes en la colonización y las transnacionales que solo desean explotar el planeta como centro de vacaciones. Esto me pareció genial y lleva a la novela a un nivel de realismo formidable.
Forma: Aquí es donde viene el mayor problema de la novela. La narrativa de Stanley Robinson es horrenda. Sí, con "H" mayúscula. Y es que la forma de plasmar todo esto, es aburrido hasta la médula. Cierto, hay episodios o pasajes muy jugosos, donde la descripción y los diálogos están al punto. El problema es que en otros, hay una aridez tremenda, donde las descripciones de las acciones y otros detalles es de tal magnitud que te quedas dormido. Técnicamente, pese a que compre el libro en el 2013, fue hasta principios de este año cuando logre terminarlo. Todo un año para leerlo, pero es que solo podía soportar unas 20 páginas y lo cerraba, con una somnolencia de la fregada. Claro, no siempre era así, pero los pasajes amenos o divertidos eran escasos. Por supuesto, el último tercio gana velocidad, en especial cuando se desata la rebelión, pero aun así, algunos trazos son infumables y es que el autor por momentos rompe el ritmo, al poner cuestiones vagas. Por ejemplo, la parte donde el psiquiatra se encuentra con Hinoko es formidable, pero la forma de resolver, es simplemente cambiar de episodio y listo, dejando todo al azar y no vemos esta trama hasta el mero final del libro. Una crítica describió al libro como un "manual" y no podía ser más cierto, ya que la frialdad y el plano científico gobiernan la novela en general.
¿Entonces como pudo ganar el premio Nébula? Indudablemente por el aporte científico y realista que hace el autor. Sin embargo, esta novela es ciencia ficción dura y se demuestra con creces. Por ello, para los que adoren los datos científicos, les parecerá estupenda. Sin embargo, para alguien como un servidor, será muy pesada. Por un instante estuve a punto de mandar a volar el libro, pero me hice un esfuerzo para acabarlo. Lo que sí me dejo, fue una sensación de insatisfacción. No puedo negar el potencial de la trilogía, pero con esta narrativa, no creo poder soportar otro libro de estos y ya son muchos que pasaron por lo mismo y tuvieron que dejar el libro en algún momento (sea este o los que siguen).
En conclusión, "Marte Rojo" vino a satisfacer muchas dudas, pero también me dejo con un sabor de boca desagradable. Claro, el que el autor hubiese caricaturizado un tanto más a los personajes (lo cual es común en este tipo de libros) le habría dado un mejor punch y el relato sería más ameno, pero también traicionaría el espíritu científico y serio del libro. Nuevamente, es el estilo contra el fondo. Y creo que Robinson apelo a esto último, aunque sacrifico la popularidad generalista de su obra.
¿Recomendable? Bueee, sí te gusta la ciencia ficción pura y dura, adelante. Por cierto, se puede conseguir en las librerías del país sin problemas. Ha sido editado por Minotauro. Sin embargo, esta editorial suele ser un tanto cara, así que mínimo lo consigue uno por más de 400 pesos (cada libro).
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Saludos a mi adorable mujer :3, así a quienes gustan de este tipo de libros.
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