sábado, 4 de abril de 2015

Umi Ryuuzaki: el coraje de las Guerreras Mágicas

He estado leyendo varios artículos y editoriales sobre el "fracaso" de Sailor Moon Crystal en los últimos meses. Todo mundo coincide con fallas en la animación como en una adaptación demasiado rígida del manga. Curiosamente, los extras y los fillers que recibió la serie antigua le hicieron bastante bien a la misma, al grado que hoy en día, se extraña ese aire simplón y romántico.

Curiosamente, Guerreras Mágicas también fue objeto de dicho cambio, donde se adapto casi de manera integra el primer arco (que termina con la muerte de la princesa Esmeralda), solo agregándole un personaje como Nova. En cambio, el segundo arco fue el que tuvo más modificaciones, pero para bien, ya que le dio un impacto renovado a dicha temporada. Curiosamente, en México está tardo en ver a la luz, ya que la primera temporada se repitió al menos un par de veces cuando comenzó su transmisión en el verano de 1996. Fue hasta agosto de dicho año, cuando inicio la transmisión del último arco. Sin embargo, ya la tradición de Tv Azteca de interrumpir las series se manifestaba, porque la serie fue interrumpida y vuelva a comenzar. Por suerte, para la segunda vez, la serie si lograron terminarla, de manera emotiva, a finales de septiembre de dicho año.

Sin embargo, pese al furor que causo el anime (en mi clase se hablaba de él, inclusive más que de Sailor Moon), la serie solo tuvo una repetición más y para diciembre de aquel inolvidable año, decidieron sacarla del aire, más cuando se estaban haciendo maratones completos de la misma. El anime trataron de emitirlo en dos ocasiones más en Azteca 7, pero de manera muy reducida, al grado que solo sacaban 3 o 4 episodios y luego para afuera. Lo cual es una lástima, ya que quedo en la misma posición que Las Aventuras de Fly, otro clásico de la cadena

Ya en la anterior entrada habíamos hablado de mis inicios con la saga de las Guerreras Mágicas y un análisis sobre una de las tres protagonistas, Hikaru. Ahora le toca al turno a Umi Ryuuzaki (Marina para los cuates latinos), la guerrera del mar.


(龍咲 海, Ryuzaki Umi, significa "Océano del Dragón Naciente") (Marina Santana en Latinoamérica) Es una joven perteneciente a una familia adinerada, aunque es muy hermosa y posee una larga cabellera azul es de carácter fuerte y al principio solo piensa en abandonar Céfiro y volver a su mundo original, ya que debe participar en un torneo de Esgrima. Pero luego reordena sus prioridades, y al despertar a su Mashin, Ceres, se da cuenta de cuánto necesita a sus amigas, y decide pelear por el futuro de Céfiro con ellas. Siempre pelea con Mokona (llamada Nikona en Latinoamérica) y discute con Guru-Clef. Su elemento es el agua. Siente atracción por Ascot en la segunda temporada (manga), aunque realmente está enamorada de Guru-Clef.


Umi Ryuuzaki es una chica de 14 años, cursa el octavo año de la escuela media elemental (que sería el equivalente al segundo año de secundaria en nuestra región). A diferencia de Hikaru y Fuu, es la más alta de las cuatro (mide 1.58 cms, lo cual se considera una estatura bastante elevada para su edad respecto a la media japonesa), de carácter huraño y quejumbroso, pese a su apariencia aristocratica. Es la hija única de una familia adinerada y su personalidad contrasta de manera importante con la de sus padres, que suelen ser bastante cursís en su trato.

Su primera aparición es en la Torre de Tokio, cuando en un viaje por parte de su escuela, en un momento se encuentra con Fuu y Hikaru de manera incidental. Sin embargo, al momento de verse, esto provoca que las tres viajen al mágico mundo de los Céfiro. Al principio es la que pone la nota cómica entre el dichoso trío, ya que como se comento, su personalidad es bastante árisca, al grado que desea volver a Tokio lo más pronto posible, sin importarle las consecuencias de lo que tenga que hacer. Aparte de que no deja de gruñirle a sus dos nuevas amigas por sus comentarios o decisiones. Inclusive, el encuentro con Guruclef es bastante divertido, ya que al momento de presentarse, está lo acusa de ser un niño y que no tiene derecho a hablarles de tal manera. En el anime esta relación se explotaría de una manera mucho más profunda, al grado que Umi se terminaría enamorando del mago y estaría a un tris de declararsele.

Conforme avanza la serie, se va viendo que la chica es la intermedia en aprender y/o desarrollar su fuerza y magia. Primero, su arma consiste en un estilete o en una espada de esgrima, lo cual confirma que era una de sus habilidades cuando vivía en Tokio (como buena "señorita"). En el caso de la magia, como es obvio, su elemento es el agua y su primer ataque es el Mizu no Ryu (Dragón de Agua). En el manga y anime la forma de aprender dicho ataque es variable, ya que Alcione aun sigue viva en el anime y es quien recibe el ataque, mientras en el otro, es Ascot contra el quien pelea para desarrollar su ataque.

La fuerza de Umi se va amplificando en la serie, ya que luego desarrolla dos ataques más (Espadas de Hielo y Tornado Azul, este último siendo más una especie de hechizo defensivo y contención). En cuanto a su Mashin, primero se manifiesta como un enorme dragón y luego como una especie de mecha con las mismas características, de color azul.


Curiosamente, Umi es quien consigue primero a su Mashin, Ceres, el cual se encuentra en una cueva submarina, la cual se encuentra dentro del mar. Obviamente, el diseño de dicho Mashin es la de un Dragón y es quien comienza a poner una serie de pruebas a la dichosa adolescente para obtenerlo.
Sin embargo, el egoísmo de Umi aun sigue siendo bastante patente hasta los finales de la serie, ya que tiene la idea de volver a Tokio tan pronto sea posible ("Quiero volver a ese torneo de esgrimaaa"). No obstante, dicho carácter le termina ayudando a poner un "alto" a Ascot y hacerlo reflexionar sobre su conducta (lo cual provoca que el muchacho se termine enamorando de ella).

Es la muerte de la princesa Esmeralda lo que hace que Umi madure en cierta manera y se plantee su existencia, así como la consecuencia de sus actos. Esto provoca que se disculpe personalmente con Clef sobre su conducta previa y que le ayude a madurar a Tata, una de las princesas de Cizeta, que busca convertirse en el Pilar de Céfiro. Pese a que Umi se vuelve un tanto más seria para la segunda temporada, su vena cómica se mantiene bastante patente en toda la serie (en especial una parte cuando se vuelve a calzar su guante de combate y comenta que ha subido de peso, ya que no le ajusta bien), sobre todo por los comentarios que tiene hacia los Mashins de Cizeta. Sin embargo, también pasa de ser una chica bastante perspicaz y despierta, a ser un tanto distraída, ya que no se da cuenta de los sentimientos que tiene Ascot hacia ella.

Otro punto que se mantiene es las constantes luchas que tiene con Nikona (Mokona) ya que Umi considera que el animalejo es capaz de transportarlas nuevamente a su mundo sin tantos problemas. Inclusive, se ve en algunas escenas como la chica lo persigue con un mazo en las manos.
Lamentablemente, la participación de la joven se ve diluida en el último tercio de la serie, cuando es rescatada por Ascot (bueno, eso entre comillas, porque luego Ascot es quien es rescatado por ella), ya que en el anime como en el manga, su participación baja en demérito de Hikaru, que se convierte en la real protagonista de la historia.

Finalmente, luego de derrotar a Debonair con ayuda de sus amigas, es cuando vuelve a Tokio. Sin embargo, en el último momento trata de declararsele a Clef, sin mucho éxito (esto solamente en el anime, ya que en el manga, no hace mucho caso de este y de Ascot).

A título personal: A diferencia de Hikaru, el carisma de Umi era bastante patente. Su carácter arisco y gruñón, la hacía un personaje mucho más complejo y divertido, aparte de que su físico elegante hacía un contraste bastante marcado. Por ello, generalmente cuando tenía un cambio de humor, la dibujaban de manera chibi, para hacer más destacable su actitud infantil. Aunque su forma de ser era difícil por momentos, esto sin embargo, le permitia ser el termometro emocional del grupo y decir cosas que las demás no podían hacer.

Lamentablemente, a diferencia de Fuu o Hikaru, su evolución en el segundo arco fue de más a menos, ya que le quitaron un tanto su sentido del humor y la hicieron mucho más seria. Claro, era inevitable por la muerte de la princesa Esmeralda, pero en algunos momentos fue tan marcado que llegaba a ser un tanto chocante. Para colmo, su presencia se fue diluyendo para mal y un personaje tan carismático quedo de lado en muchos sentidos.

Sin embargo, Umi no se volvió mi personaje favorito y la razón es que era una distraída de primera, más en la cuestión amorosa. El personaje le restaba carisma, ya que pese a ser bastante precoz por momentos, que en esto no tuviese dos dedos de frente, era algo extraño y poco congruente. Aun con esto, Umi no dejaba de mostrar atractivo, elegancia y una personalidad que hizo que muchas fans de la serie se decantaran por este singular personaje.


Curiosamente, el atractivo de Umi era tan patente, que ella lucía los trajes más reveladores o sexys en su momento, como su traje de batalla final, donde no usa falda como el resto de sus compañeras o cuando es secuestra por las princesas de Cizeta, donde tuvo un vaporoso vestido árabe con el ombligo descubierto.

El doblaje en su momento volvió a dar dolores de cabeza a los fans, ya que Angelines Santana fue su voz para Latinoamérica. Como se había comentado en la entrada anterior, se llego a barajear un montón de actores para su voz, pero hasta hace pocos años, cuando se vio que su voz correspondía a dicha actriz (y que también le toco doblar en su momento, a la Jenny de Forrest Gump).

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Saludos a mi Guerrera mágica ^^, así a quienes gustan de esta serie.

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