Así que este último tiempo he comenzado a releer historias consideradas como "clásicas", para estar al día. Fue justamente el podcast de "La órbita de Endor" que me animo a leer un cómic que ya hace 10 años, había visto anunciado en aquellos mangas primigenios de Editorial Vid: Kingdom Come.
Kingdom Come plantea una humanidad repleta de metahumanos (seres con superpoderes), los cuales utilizan sus habilidades para su beneficio o para aplicar una forma distorsionada de justicia. Esto los enfrenta con los miembros de la Liga de la Justicia, contando la nueva generación y el apoyo de los héroes originales: Superman, la Mujer Maravilla, Batman, Linterna Verde y Flash, entre otros, que regresan después que una explosión nuclear destruyera Kansas (el hogar de Superman) este hecho los devuelve a la palestra en medio de una nueva sociedad de villanos liderada por Lex Luthor y las Organización de las Naciones Unidas en contra de los metahumanos.
La primera vez que supe de este cómic, fue como decía, en los promos o anuncios que ponía Editorial Vid en sus distintos mangas. En especial Rurouni Kenshin llegaba a saturarse en sus últimas páginas, de anuncios al respecto.
Pero entonces vivía una etapa "fóbica" como la de cualquier fan primerizo del anime. Esta se extendía a las obras de Disney y a toda cosa que viniera de Gringolandia, como el cómic.
Claro, había sus excepciones, como Crepúsculo Esmeralda o la Muerte de Superman, pero mantenía un fuerte hermetismo contra otras obras, consideradas como "maestras". Por suerte, uno termina madurando y comienza a apreciar las cosas buenas de la vida. Deje de ver el arte de Alex Ross como algo chafa, para disfrutarlo en todo su esplendor.
¡Genio! |
El día de hoy, mientras iba con mi resfriado al trabajo, puse el podcast, esperando que no me durmiera. Y vaya que funcionó, ya que LODE reseño de forma estupenda Kingdom Come, al grado que al llegar a la casa, me lo descargue y me lo leí en menos de una hora.
Como dice la reseña, estamos en un futuro no muy lejano, donde el mundo esta repleto de metahumanos, pero debido a este sobrepoblamiento, las normas de responsabilidad se han ido al retrete. Los antiguos "héroes" estan retirados, decepcionados de como la vida ha tomado su curso.
Un ministro, Norman McCay le da los últimos óleos a un moribundo Sandman y ve con tristeza como el mundo esta lleno de "niños" con poderes que se la pasan jugando al superhéroe. Es cuando la muerte de un héroe, provoca una crisis y una reconcientización de lo que esta pasando.
En ese momento, Siniestro, un viejo héroe, "secuestra" a McCay y lo lleva a un viaje extraño donde este conoce toda la historia posterior, de primera mano. Desde el regreso de Superman hasta los eventos que llevan a un cataclismo terrible.
Para empezar, la historia es fabulosa. Vemos un futuro "distópico" manejado en base al derrumbamiento de la moral, de las buenas costumbres. Esto a una decepción entre la misma humanidad y los metahumanos, lo cual ocasionó una fractura que se evidencia de múltiples maneras entre cada metahumano retirado.
Mientras Superman esta retirado, Wonder Woman se ha vuelto loca de ira y decepción y Batman ahora parece un "fascista", también otros héroes se afectan, como un Linterna Verde que vive alejado de todos y un Flash que prefiere pasar desapercibido a su propia manera. Cada personaje esta envejecido, no solo físicamente, sino también emocionalmente por todas las que han vivido.
Y aunque parece predecible la forma en que vuelven todos, vaya forma de interpretarlo. Por momentos, el cómic no tiene una línea definida. No sabemos quien es bueno y malo, ya que los personajes durante cada evento, se han cuestionando sus propios ideales y acciones, al grado que el concepto que teníamos previo a ellos, se va cambiando durante la historia.
También, los giros de tuerca son estupendos. Por momentos uno ve a Batman como un salvador y luego como un traidor y viceversa.
Otro punto a manejar es el trato de Superman. Siempre hemos visto como el "azuloso" es el estandarte de la rectitud, de la moral y de la justicia. Sin embargo, aunque aca el héroe no pierde eso, claro, hasta que le tocan las narices, se desenvuelve de tal manera que no pierde su esencia, pero a la vez lo dota de otras dimensiones, que uno se identifica terriblemente con él, no tanto por sus poderes, sino por las dudas que tiene de su proceder, pero a la vez que no puede echarse para atrás.
Tecnicamente, se vuelve el mejor personaje de toda la saga y su final, es igualmente increíble.
Los otros personajes no desmerecen e inclusive son tan humanos, que algunos llegan a caer mal y otros en cambio los elevas a otro nivel. Inclusive, los "nuevos" metahumanos tienen su carisma, en especial Magog, que me parece un personaje complejo.
Y aquí es donde hago un comentario muy personal. Al leer esta historia, es como viera la sociedad actual. Como muchos saben, soy un viejo ya y tengo otros ideales y otros conceptos. Pero al platicar con generaciones más jovenes, veo como estos conceptos se han ido diluyendo poco a poco. El respeto y la responsabilidad ya no es como antes. Solo existe el hacer las cosas y ya (como decía Magog: la gente eligió a quien podía matar, no quien no podía matar), lo cual ha ido perdiendo el significado de la vida, al menos como yo lo percibí en su momento. Por momentos entendía las acciones de la vieja Liga de la Justicia contra los nuevos metahumanos. Me gustaría que esa vieja percepción de lo bueno y malo volviera, tal vez sería un mundo mejor.
Es justamente también por esto, que la historia toma un climax brutal, dramático, aunque con un pequeño detalle con ese momento Deux Machina, que aporta Lex Luthor. Pero como decía con "Pluto", el autor lo aprovecha de tal manera, que uno se queda encantado y aunque tiene un final cliche, superheroico, esta tan bien aplicado, que me hizo soltar una que otra lagrimita de la emoción.
Aunque la participación de McCay al principio es meramente ornamental y sirve más como un proceso de identificación con el lector, luego toma un papel activo y tan trascendental que a la vez es muy natural para todos. Ya para cuando lo lean, se darán cuenta. No puedo adelantar más, porque sería spoilear demasiado.
Pero vamos, que a diferencia de Pluto, Kingdom Come me dejo un sabor muy agradable al terminar de leerlo, pese al momento agridulce del final. Me hizo emocionarme, no solo por la historia aunque predecible, pero bien hecha, sino por los personajes y su desenvolvimiento en toda acción y forma de pensar.
Sin embargo, vuelvo a reiterar que hay dos personajes que se llevan a los otros de corbata: Superman y Batman.
Uno representa el ideal, el otro el realismo, e inclusive dan un cierto contexto a que esto jamás los hizo ser tan amigos, pero también forman un excelente complemento, ya que cada uno trabaja a su propia manera, pero teniendo el mismo ideal. Eso es lo que yo llamaría, una auténtica amistad.
Pero mientras en otros cómics, Batman resulta ser más carismático, aquí veo que Superman es aun mejor que el encapuchado. No solo por el papel que toma, sino la forma en que adaptaron un personaje que sería considerado muy soso, a un nivel mucho más complejo, pero sin salirse de su propio canon.
Como dato final, siempre vemos que los humanos somos bien idiotas. Aca no varía eso, pero también como esa idiotez va ligado al valor humano de la compasión y el perdón.
En resumidas cuentas, Kingdome come es un cómic altamente recomendable, altamente dramático, altamente divertido, altamente...bueno, es genial. Para cualquier fan, o al menos conocedor del cómic, debería leerlo. Vale la pena, no solo por el arte de Ross o la historia de Waid, sino por todo lo que involucra este cómic.
Lo mejor: los personajes
Lo peor: ciertos momentos cliches
Lo original: El arte.
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Saludos a mi :3 princesa, así a quienes gustan del buen cómic.
Ajaaaaá, pero tu confesión inicial no me la dices en persona, ¿he?
ResponderBorrarEl otro día, en la convención de videojuegos, de hecho estaban vendiendo dos ediciones originales de este comic. Hasta pensé en comprármela pero lo cierto es que la tenemos en la casa, y que mi hermano ya me metió el gusano de que si vamos a comprar comics clásicos que sean en ediciones especiales y en idioma original.
Recuerdo cuando leí por primera vez este comic y no entendía muy bien muchas cosas. Acostumbrada al mundo medio idílico donde los superhéroes y supervillanos siempre tienen un papel social claro, el hecho de que aquí la cuestión se complicara me resultaba muy difícil de entender. Fue como una revelación, a la que si le sumamos las épicas ilustraciones de Ross, resultó impresionantísima en su momento (y hasta ahora).