sábado, 17 de diciembre de 2016

La Guerra de Vietnam: una historia oral

Generalmente para mis entradas sobre algún libro he optado por dar una introducción, luego hablar del autor y finalmente mi crítica respecto a la obra. Sin embargo, en esta ocasión he querido obviar un poco esto y hacerlo de manera más directa. La razón es que voy a comentar uno de los mejores libros que he tenido el gusto de leer en este año.

Ya en otra entrada había comentado lo decepcionante que resultó este año en cuestiones de lectura. Por ello deje de comprar el formato físico de manera dramática y me enfoqué mejor en conseguir libros electrónicos, esto con el fin de no decepcionarme y no sentir que gaste mi dinero en vano (con algunas buenas excepciones). Por ello, los mejores libros que estoy leyendo ahora son mediante el dispositivo, mientras tengo cuatro libros en físico que he dejado aparcando ya por un largo tiempo.

Por ello, "La Guerra de Vietnam, una historia oral" de Christian G. Appy vino a representar una enorme excepción y que vino de una forma a la vez extraña como feliz. Un día que fui con mi mujer a comer a casa de mi comadre, comenzamos a hablar de historia y mencionó este libro de forma encarecida. Así que no tarde en pedírselo y debido a que era un libro prestado, me lo chute de forma rápida. Sin embargo, debo decir que no fue ningún esfuerzo, ya que me dejo ampliamente satisfecho y sobre todo, actualizo los conocimientos que tenía sobre dicho conflicto.

Por lo tanto, la siguiente entrada será un ir y venir entre la historia oficial y lo que relata este libro, que debo decir tiene un formato que me encanta: fragmentos de entrevistas a los diferentes participantes del conflicto y su opinión muy personal sobre como empezó, se desarrolló y termino de dicha forma.


Entender el conflicto de Vietnam es harto difícil, ya que primeramente, no fue una guerra entre Estados Unidos y dicho pueblo, esto debido a que el Congreso Norteamericano jamás le declaro la guerra a dicho país. Para empezar, Vietnam fue parte de la vieja Indochina que pertenecía a las posesiones coloniales que tenía Francia a finales del siglo XIX. Sin embargo, la derrota del país galo en la Segunda Guerra Mundial provocó un movimiento independiente en dicha región, el cual fue encabezado por Ho Chi Minh en la década de los cincuentas.

El pueblo vietnamita, de naturaleza pacífica y conciliadora, de repente mostró una cara totalmente distinta gracias al liderazgo de Minh. Esta dualidad provocó que Francia entrase a proteger dicha colonia de forma ambigua, creyendo que con el hecho de desplegar un poderío militar podría hacer la diferencia. La batalla de Dien Bien Puh vino a romper este mito y provocó la salida de Francia de aquel país. Aquí es cuando Estados Unidos metió su enorme cuchara (bueno, en realidad lo hizo desde antes al aportar armamento a Francia, la cual aun seguía afectada por la Segunda Guerra Mundial).

¿Por qué los gringos comenzaron a estar de metiches? Sencillo. La amenaza del comunismo. Luego de que la URSS lograse establecer una esfera que lo protegiese al terminar el conflicto de 1945, se veía con miedo como el comunismo se quería implantar en otros países (razón por la cual EUA duro tanto tiempo en Japón y como trataron de mantener al Emperador, ya que una revuelta hubiese sido de color rojo y una amenaza más para los gringos), en especial los del sureste asiático. Aunque China mostraba una rivalidad con la URSS, también se tenía miedo de la influencia de Mao, por lo cual EUA no dudo en ayudar a los galos e inclusive estuvieron de mediadores cuando estos se retiraron del país.

Sin embargo, la política de "halcones" del gobierno gringo comenzó a tener consecuencias de sus manejos rudos y poco experimentados. En su momento Ho Chi Minh se acerco a ellos para mediar la paz, pero lógico lo rechazaron y esto provoco que el líder vietnamita le tuviera birria a los gringos. Finalmente, con la resolución del conflicto mediante la ONU, se separo a Vietnam en dos fracciones: la Norte y Sur. Se esperaba una posterior reunificación, mucho más éxitosa que la coreana, pero todo falló.

El choque entre el Norte, de ideología marxista y el sur, que estaba dominado por capitalistas pero de corte corrupto, provocó que EUA volviese a meter las manos, aunque de forma más pacífica, haciendo elecciones para unificar al país. Por supuesto, la corruptela de los presidentes sur-vietnamitas provocó que el gobierno de Ho Chi Minh (el cual inclusive relegó su postulación como ofrenda de paz) le rehuyera a esto. Con una población que apoyaba a los norteños, EUA tuvo que hacer algo. Aquí es cuando viene el incidente del golfo de Tonkin. Muchos dicen que fue un propio ataque gringo para provocar la guerra, pero al final cabo, desato una serie de medidas que aumentaron el arsenal y hombres que apoyaban al ejército sur-vietnamita. Sin embargo, se pasaron de 30,000 a más de un millón de hombres en el espacio de tres años.

El autor.

Aquí me detengo para hacer hincapié a esta introducción del conflicto y relacionarlo con el libro. La mayoría de los libros en castellano sobre Vietnam son bastante reducidos. Generalmente se enfocan de manera parcial a un conflicto entre los vietnamitas norteños y sureños, donde EUA trato de ser el chico bueno y apoyar a los últimos. Los norteños, los malos o llamados Vietcong, quisieron arruinar eso y provocaron la guerra. Por supuesto es un mito y parte de la mucha historia que se escribió en aquellos años y perduró hasta principios de los noventas. En mis libros de historia de la secundaria aun se manejaba esa versión.

Algo que me gusto de este libro, es que el autor, mediante el testimonio de varios entrevistados, hace una primera parte donde expone la mentalidad y psicología del pueblo vietnamita y las circunstancias que pasaron, no solo desde la colonización francesa hasta la llegada de los gringos al país. También expone, en palabras de otros, porque se dio dicho conflicto. Lo ideal sería cuestionar el ataque del golfo de Tonkin, pero va más allá y dice que era algo predecible, que tarde o temprano las cosas iban a ocurrir de dicho y que Tokin se ha magnificado y malinterpretado por gente que no tiene ni idea de como estaban las cosas. Más de acuerdo no puedo estar al respecto.

Esto hace que el libro te comience a atrapar. La ventaja de ser escritos testimoniales es que en lugar de ser una prosa con tintes aburridos, cada persona te da una narrativa y perspectiva diferente, lo cual lo hace bastante fresco y llamativo. El problema es que puede haber una tergiversación de hechos, más cuando solo entrevistas a una parte del conflicto. Vamos a ver adelante porque no es así.

Entre 1965-1968 la cosa se puso color de hormiga, en especial para el Vietcong, cuando EUA lanzó una serie de ofensivas con el fin de exterminarlos. Sin embargo, la inteligencia del ejército comenzó a ver las cosas como eran. Para empezar, no era una batalla tradicional, donde podías acabar con los efectivos del enemigo o destruir su cabeza y con eso acabar la guerra. Aunque se reportaron cifras espeluznantes en bajas enemigas, el Vietcong seguía aportando hombres para la batalla y aunque las bajas norteamericanas fueron mucho menores, el efecto psicológico no comenzó en hacerse notar.

Estados Unidos trato de responder con helicopteros, aviones y bombardeos estratégicos, pero los vietnamitas norteños no tenían algo visible que atacar. Estos respondían más con contraataques y con desmoralizar a las tropas gringas que en incursión iban tras ellos y caían en trampas mortales (un ejemplo es en la película Forrest Gump, donde el protagonista logra rescatar a su pelotón luego de ser atacados por soldados del Vietcong, que en ningún momento se les ve la cara). Esto tuvo el efecto de ir drenando a los soldados, los cuales de forma lamentable, fueron consentidos por los altos mandos, permitiendo no solo un montón de comodidades en Saigón, sino inclusive el tráfico cuasi legal de muchas sustancias. Aquí es donde el desmoronamiento social se inició y de forma dramática.

Otra cualidad del libro es que tiene pasajes de ambos lados del conflicto. Cierto que la mayoría son de origen gringo, pero los vietnamitas son muy sustanciales pero sobre todo ilustran algo que los hacía mantenerse en pie: una ideología. Muchos jóvenes norteamericanos no sabían porque iban a Vietnam y el solo matar no era un motivo para ellos. En cambio, los vietnamitas tenían el objetivo de liberar a su pueblo y demostrar que no serían esclavos de nadie. Esto provocó que la determinación fuese mayor y que el estrés de combate que padecían muchos gringos, no existiese casi entre los asiáticos. Esta diferencia tampoco fue tomada por los altos mandos y la inteligencia, lo cual se demuestra con testimonios que son realmente crudos pero contundentes.

Esto se refleja sobre todo con la masacre de My Lai, que es una narrativa horrenda pero poderosa y que ejemplifica lo peor pero lo mejor del ser humano (suena extraño, pero hay que leerlo para entenderlo).

Vietnam del Norte lanza la ofensiva del Tet y todo el castillo de naipes se cae. EUA creía ganar la guerra y el presidente Johnnson se ve amarrado de manos, ya que prometía una victoria y de repente la prensa sufre censuras, se reclutan más jóvenes y esto provoca una ola de ataques hacia su persona y la administración. Westmoreland, comandante en jefe de la misión y secretario de Defensa, no tiene otra opción que atacar más y más duro, llegando inclusive a plantearse el uso de un ataque nuclear. Aquí es cuando aparece Nixon que promete el retiro de las tropas, pero en secreto no solo ataca a Vietnam, sino a Laos y Cambodia, creando un genocidio de proporciones monstruosas en la zona. Lo peor es que la porquería que va extendiendo allí, toca a su persona y ocurre Watergate, lo que se conoce como el fin.

De antemano digo que la obra no es nada militar. El autor no se enfoca en hacernos un diagrama de ofensivas ni nada, es más como un hecho histórico y ya. Me hubiese molestado en otro punto, pero acá estaba tan enganchado con la lectura, que me pareció lo normal. La razón es que es un libro sobre Vietnam y a la vez no lo es. No busca hacer una lectura de hechos, sino redondear muchas aristas y puntos que no se han tocado previamente, en especial me pareció revelador sobre las manifestaciones pacíficas que hubo contra la Guerra. 

Un entrevistado, que formo parte activa en eso, es muy duro y revela que pese a ser populares con un sector, con el tradicional llegaron a ser muy atacados, esto por su naturaleza hippie, andrajosa y sucia. Siendo sinceros, un servidor pensaba lo mismo, ya que cuando veo a un tipo de estas características, no puedo evitar pensar que es un vago. No por eso logró entender a tipejos como Gustavo Días Ordaz o el propio Nixon, pero es que el movimiento pacífista tampoco tuvo buenas consecuencias debido a su mal manejo (lo cual es irónico, ya que también fue algo criticado en el propio ejército y los políticos).

Sin embargo, aquí llegamos a un prietito del arroz, pero que es muy personal. Lo de Nixon y su administración, en especial con el odioso Kissinger, fue tratado de poca forma en el libro. No digo que no sea contundente, pero allí si me hubiese gustado un poco más de redundancia al respecto. Claro, cuando comenté esto con mi comadre, me dijó que era imposible, ya que hablar de Nixon hubiese abarcado un libro más (aunque en mi interior, sigo pensando en más). 


Nixon manipula la situación de forma increíble. Por un lado comienza a disminuir el efectivo y las tropas, tratando de hacer que los vietnamitas sureños tomen su lugar en la lucha (la famosa Vietnimización). Pero la corrupción en sus filas y la mala fama que han creado ellos y los gringos hace que la población se vuelve a favor de los norteños y el Vietcong. El ataque a Laos y Cambodia era una forma de evitar ataques del Vietcong pero tienen efectos devastadores a nivel político y poblacional. Es cuando Nixon decide retomar los tratados de paz, pero con la opción de que ellos salgan corriendo y seguir apoyando económicamente a sus aliados (lo cual finalmente no ocurrirá).

Pese a los estira y afloja, el tratado se firma en París en enero de 1973. Sin embargo, no se sabe si fue la última maniobra del presidente, ya que esta envuelto en el caso Watergate, donde se le acusa de guerra sucia contra el partido demócrata y así asegurar una reelección. Nixon se cae y Ford termina la evacuación de las tropas gringas, salvo las de un destacamento en la embajada norteamericana. El miedo cunde en las tropas survietnamitas, más cuando Vietnam del Norte respeta el 1974 como tregua, pero no por la paz, sino para rearmarse y ahora sí, tomar todo el país.

1975. Vietnam del Norte lanza una enorme ofensiva y el Sur se derrumba a pedazos. A pesar de tener equipo y material, los vietnamitas del sur no pueden evitar el empuje arrollador de sus vecinos y Saigón se ve asediada. Es dramática la salida de los gringos con varios vietnamitas del sur y como los barcos y portaaviones de alrededor se atascan de gente deseando escapar como sea. No obstante, la unificación del país se hace en términos más tranquilizadores y aunque hubo muchas ejecuciones, eran menores a las esperadas. Vietnam del Norte, más bien, toda Vietnam desea empezar de cero.


La última parte del libro es bastante dramática. Vemos el relato de muchos funcionarios y como lograron escapar, así de gente que estuvo apoyando a los norteamericanos y que también lograron escapar. Es una forma magnífica de cerrarlo y aunque me hubiese gustado más un contexto sobre lo que sucedió con Vietnam, no me decepciono en absoluto. Tal vez lo más irónico es un breve relato que hace Westmoreland al final y donde sigue defendiendo la idea de que estaban haciendo lo correcto (y lo cual se replica en otros entrevistados, aunque también comentan que hubieron muchos errores al respecto).


Esto último vino a ejemplificar lo genial de este libro y como la historia es al fin al cabo, una versión parcial de los hechos. Para hacer algo verdaderamente fidedigno es necesario tener la perspectiva de todos los participantes y aun así, las cosas tendrían su varianza. Aunque este libro no es perfecto, debo decir que da una versión más universal y concisa del asunto, pero sobre todo en cosas que dejamos de lado, como el consumo de drogas entre las tropas, la vivencia de los vietnamitas del sur, la política y el miedo del gringo supremacista a perder un pulso. Esto y muchas cosas más, hacen al libro bastante completo.

Si lo comparo con "Undergroung" de Haruki Murakami o "Voces de Chernobil" de Svetlana Aleksiévich, es bastante mejor. Lamentablemente, el conflicto de Vietnam no es bien conocido y aun queda mucho por ahondar y aparte, genera prejuicios que perduran aun hoy en día. Pero de antemano lo digo, que es bastante recomendable y una forma fácil como sencilla de leer sobre este conflicto que marcó no solo la vida de los norteamericanos, sino del mundo entero.

Por cierto, este libro se puede conseguir en México, mediante la editorial Crítica. Sin embargo, debo decir que su precio no es nada barato. 

----------------------------------------------------------------------------------------

Saludos a mi mujer :3, así a mi comadre por prestarme esta joya, como quienes gustan de la buena historia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario