Tengo un montón de películas por reseñar. Al menos tres que me chuté en semanas anteriores y que supuestamente lo iba a hacer el día de hoy. Sin embargo, como mi dotación de anime se me agotó durante la semana (lo cual es bastante extraño, ya que me he puesto al corriente con lo que tenía pendiente), decidí irme hacia los filmes pendientes y oh sorpresa, me tocó disfrutar de una gran película que lamentablemente fue menospreciada en los Oscares y por obvias razones. Sí, hablo de "Concussion" o "La Verdad Oculta" (como fue nombrada aquí en México).
Este filme le tenía el ojo puesto desde noviembre del año pasado, cuando la sacaron en cartelera, pero como he comentado, el trabajo de mi esposa y un servidor apenas nos ha dado abasto para tener algo de tiempo libre (y reitero, el disponible lo usamos para dormirnos en el sillón aun con la ropa de trabajo puesta), aprovechándolo para ver filmes, dizque más importantes. Por desgracia, también con esto me ha tocado ver bodrios que va a pasar un rato en que reseñe o que lo haga cuando tenga prisa con alguna entrada.
Así que cuando ya la tenían en formato libre de impuestos, no tarde en adquirirla, e igual por trabajo la fui postergando hasta el día de hoy. Debo decir que fue un buen filme para verlo mientras estaba haciendo la limpieza en casa y me la pase muy bien, aunque igual me hizo ver la crudeza que se maneja en uno de los deportes más seguidos y que genera más ganancias: la NFL. Y no niego que está, igual que en el filme, habrá metido mano para que la película no fuese tan bien recibida por la crítica y ni siquiera apareciese en los Premios de la Academia. Porque en verdad, es algo oculta e incómodo.
Argumento: Bennet Omalu es un médico patólogo de origen nigeriano que trabaja en el departamento forense de la ciudad de Pittsburgh, Pensilvania, conocida ciudad por su fanatismo hacia el fútbol americano. Al tiempo, el legendario jugador de los Pittsburgh Steelers, Mike Webster, es encontrado muerto en su camioneta. Omalu le toca hacer la autopsia y encuentra datos consistentes con un daño cerebral severo que no se revela en las placas radiográficas. Esto lleva a encontrar una correlación entre dicho daño con las lesiones sufridas por dichos jugadores, en especial las que producen una conmoción.
La publicación de dicho ensayo llevara a Omalu a enfrentarse no solo a la opinión pública, sino también a una de las organizaciones más poderosas del mundo, la NFL.
Comentario personal: El fútbol americano es el eje de muchos norteamericanos. Tal como es el fútbol en estas latitudes, el rey de las tackleadas es considerado el deporte por excelencia en el vecino país del norte. Sí, el béisbol es grande, pero su importancia disminuye cuando aparece la temporada de americano en otoño (de allí que inclusive el Clásico de Otoño se juegue a media temporada, permitiendo lo demás a su rival). Si no le entras al béisbol, sería al fútbol americano y hoy en día, inclusive los tazones colegiales (las finales universitarias) son seguidos con tanto fervor como la propia NFL, la cual es la liga más rica a nivel nacional de todo el mundo, superando con creces a los ingresos de la FIFA u otra organización similar. Esto no solo se debe a una efectiva acción de mercadotecnia y contratos televisivos multimillonarios, sino sencillamente porque es un aspecto cultural de gran peso.
Esto precisamente lo recalca la película en todo momento, haciendo ver que el descubrimiento que hizo el protagonista, el Dr. Omalu (Will Smith) fuese tan importante en todos niveles. Este rubro junto con otros, hacen que el filme sea bastante potente pero sobre todo, creíble y sin caer demasiado en el dramatismo que llega a caracterizar a este tipo de producciones.
Primero, se hace hincapié en la figura de Omalu, donde va en contra del estigma que se tenía del susodicho, tratándolo de médico brujo en el momento que hizo su publicación y declaraciones sobre la encefalopatía traumática crónica (término que se acuñe cuando se habla del caso de Webster por primera vez). Se muestra que no era cualquier hijo de vecino, sino una persona bastante inteligente y con un cariño por la vida bastante patente (los primeros 15 minutos lo hacen y sin demasiados aspavientos). Esto provoca que trate de encontrar la muerte de Webster, el cual como otros jugadores que sufrieron la misma encefalopatía, se ve en contrapartida con la lucha que hace Omalu por su cuenta.
Así que de manera estupenda, vemos como se retrata la vida de Webster antes y después, así de Long, Waters, Strzelczyk (la cual me pareció una de las muertes más dramáticas y que sin embargo, se plasmo de forma verídica) y sobre todo, la de David Duerson, que sirve de punto de inflexión, no solo para el filme, sino para los hechos que se vinieron después para la NFL.
El primer tercio de la película como ya se comentó, hace una presentación de Omalu y su curriculum, así el apoyo de la gente que tenía a su lado, como su esposa o su jefe, Cyril Wecht, llegando con la publicación de su trabajo en el 2004. El segundo tercio, se ve la repercusión del mismo, como este llega a la NFL y Omalu se siente ofendido por la ceguera que muestran los directivos y jugadores. A diferencia del primer tercio que muy dinámico (inclusive al mostrar de forma rápida a las conclusiones que llegó Omalu con respecto a Webster y su profesión), el segundo es un poco más lento y lleno de diálogos y reflexiones entre el protagonista, así con otras personas, incluyendo a Julian Bailes, que viene a ser el soporte de Omalu cuando se quiere dar por vencido.
De forma lamentable, este segundo tercio resulta un poco más tedioso y hasta aburrido, porque hay conversaciones que son redundantes o que solo buscan sacar la lágrimita fácil por momentos, en especial con las conversaciones que tiene Omalu con su esposa (la cual no se maneja tan bien su participación y llega a ser más un elemento dramático barato que algo verídico). Inclusive, el tono oscuro del filme toca fondo aquí, de forma muy cruda, cuando la NFL acepta escuchar a medias a Omalu, pero como en un punto para promocionarse. Esto desata la crisis en la familia del médico que no tiene otra opción que mudarse a California. El enfrentamiento con la NFL esta bien representado y no se necesita de un enorme telón para mostrar lo sucedido, haciendo el producto más serio y realista.
El punto de inflexión es Duerson y su suicidio, lo cual provoca que Omalu vuelva a tener credibilidad y que las investigaciones se vuelvan a reanudar. De forma lamentable, esto no ocurrió en la vida real y es que esto sucedió posterior al 2011, mientras que lo sucedió realmente es que a raíz de la publicación del estudio, más gente se acerco a Omalu y muchas de las encefalopatías fueron confirmadas, lo cual devino en retiros prematuros de grandes estrellas e inclusive en demandas de familiares al encontrar datos de la ETC en muchos de los jugadores retirados. Finalmente, en 2009 la NFL si aceptó que el deporte podría ser una causa y que terminó con un broche final triste, cuando en el 2012, Junior Seau fue encontrado muerto en su casa por una bala en el pecho.
Esto en el filme no es mostrado como tal, alterando un poco para darle más dramatismo, lo cual no me pareció tan forzado, porque al final remataron con el lamentable suicido de Seau y que una gran estrella como este, terminase como otros tantos. Este punto lo quiero recalcar, ya que pese a que el filme pueda usarse como propaganda escandalosa, en realidad hace una buena inflexión entre la realidad de Omalu con el amor por el deporte, para lo cual se utilizan del personaje de Baldwin, el Doctor Bailes, para enumerar esto.
Fuera de esto, la película tiene buen ritmo, sí es cierto del bajón del tercio medio, pero se compensa bien con las excelentes actuaciones de Will Smith, Alec Baldwin, pero sobre todo Mel Brooks, que da un buen toque trágico-cómico en sus aportaciones. La música que inicia bastante bien con James Netwon Howard, sufre igual un cierto bajón, ya que el intro de la película me pareció muy original.
En cuanto al doblaje, debo decir que me lleve buenas sorpresas. Mario Filio volvió a hacer a Will Smith y lo hace bastante bien, al agregar un tono medio extraño a su voz, haciendo ver a Omalu con cierta dicción africana, como si mascase el idioma o apenas lo hubiese aprendido. Si a esto agregamos voces como la de Humberto Solorzano, la de Carlos Segundo o Hermán López (que vuelve a caracterizar a Mel Brooks, tal como lo hizo en "Buscando a Nemo"), lo hace uno de los mejores doblajes que he escuchado últimamente y que no le envidia nada al original.
En conclusión, "Concussion" es una buena película, que tiene un gran argumento, hace una crítica sobre la NFL bastante cruda, con poco dramatismo y sin tratar de justificar a nada o nadie. Las actuaciones son sobresalientes y las conclusiones que se llegan son muy interesantes. Tal vez el problema es cierto bajón de ritmo que se da a la mitad, pero se compensa con un final bastante aceptable aunque previsible. Recomendable por donde uno la vea y que vale bastante la pena.
Ahora, vamos con mi opinión personal con respecto al tema de las contusiones en el fútbol americano. Es innegable que las sacudidas que sufren los jugadores de este deporte son enormes. No hablamos de un brazo o una pierna roto, inclusive de las famosas lesiones medulares. Sino el hecho de perder la calidad de vida, en cuanto a la salud mental. Una de las ventajas que tuvo el Doctor Omalu para hacer su trabajo, es que no era fan de dicho deporte. Eso le permitió no solo realmente ver las cosas como eran, sino también exponer dicha verdad. Tal como se remarca por momentos en la película, el fútbol americano no solo da empleo a mucha gente, sino también esperanza y una forma de filosofía que muchos jugadores y retirados manejan hoy en día: Sí quieres ser alguien, no dejes el deporte.
Por ello, que de repente venga un estudio que reafirme que jugar americano es malo, tumbaría todo lo bueno y malo del fútbol americano. Personalmente no puedo dejar de estar de acuerdo, pero también, a la vez, igual no puedo negar que me emocionan las tackleadas y golpes en el emparrillado. La posición que hubiese tomado al fin al cabo, hubiese sido la de Bailes: uno no puede dejar de amarlo, pero igual tengo que denunciarlo por el bien de los que están jugando. Cada quien tendrá su opinión al respecto, y yo lo digo de todo corazón, porque soy un fan incondicional del mismo. Sí, la película me incomodo, pero también confirmó algo que ya había supuesto hace tiempo. Toda una lástima.
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Saludos a mi mujer :3, así a quienes gustan de este deporte y este tipo de filmes.
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