Los juegos de Arcade fueron mi fascinación a finales de los años ochentas. Como buen chamaco fan de la TV, el poder controlar "monitos" por la pantalla, evocando a héroes de acción o pistoleros, eran mi pasión.
De allí que siempre tratara de juntarme en la primaria con niños que tuvieran una Atari o la naciente Nintendo, para jugar o de plano, solo ver jugar a alguien este tipo de "joyas".
Pero mientras la Nintendo o la Atari apenas podían desplegar unos gráficos cuadriculados, la Arcade o las maquinitas eran otra cosa. No se podía comparar en absoluto el despliegue de música y movilidad, de allí que estuviera pegado a estos lugares por horas, pese al regaño de mis padres.
Fue hasta principios de los noventas, cuando comence a reconocer los distintos juegos que aparecían, pero en especial los de tipo "peleas de scrol roll". Lease, donde tenías que manejar un personaje y hacerlo avanzar por escenarios y enemigos formidables, solo armado con una pistolita o con un simple poder, y claro, con tu propia habilidad. De allí se derivaron juegos tan emblemáticos como las Tortugas Ninja y los Simpsons.
Sin embargo, hubo uno que le tengo mucho cariño, pese a su dificultad y que hoy en día, aun sigo jugando en el emulador de SNES: Sunset Riders.
El juego, el cual está colocado en una ficticia versión del Viejo Oeste Americano, se desarrolla sobre cuatro cazarrecompensas quienes buscan su premio por eliminar a los forajidos más buscados del oeste. No hay una verdadera "línea de historia" más que la de recolectar progresivamente recompensas más altas. Al comienzo de cada nivel al jugador se le muestra un cartel de "Se busca", mostrando al criminal, la recompensa por detenerlo, y la línea cliché de "Se busca vivo o muerto".
Konami habían tenido un éxito increíble con "Contra", una suerte de videojuego de Arcade, donde manejabas a un tipo al estilo de "Rambo", que tenía diferentes tipos de rifles, con los cuales atacabas al enemigo de turno, que eran desde combatientes como tú, hasta alienigenas de un tamaño bastante considerable.
Fue este modo de juego, el scrol roll, que le dio un gran éxito a la compañía y comenzo a aplicarlo a otras licencias que fue adquiriendo con el paso de los años. Castlevania fue otra de las franquicias líder de la compañía y que le comenzaron a dar experiencia, no solo para aplicarlas en el mercado casero, como la Famicon, sino también en las mismas Arcadias.
No conforme con explotar las licencias de los Simpsons (que luego serían de Acclaim) o de las Tortugas Ninja, Konami creo sus propias franquicias, entre ellas, la mítica Sunset Riders.
Aquí, al estilo Contra, manejas a una suerte de mercenarios que deben movilizarse por diferentes stages, para vencer a los enemigos que van apareciendo a base de balazos, para llegar con el jefe final, que tiende a tener habilidades sobradamente superiores a las tuyas. Es cuando la habilidad del jugador aparecía y tenías no solo que esquivar balazos, sino también dispararle varias veces al "Boss", hasta hacerlo parpadear de rojo y luego vencerlo, y claro, cobrar la recompensa que te merecía.
Pero las diferencias con Contra eran más que evidentes. Primero, los saltos eran mucho más largos y aparte el tipo de armas no eran tan evolucionadas, comenzando con los mismos personajes.
Aquí tenías la opción de elegir de cuatro personajes: Steve, Billy, Bob y Cormano. Los primeros dos, son los tipicos gatilleros, que eran identicos, solo que uno era rojo y otro azul. La habilidad que tenían con sus pistolas es que eran muy veloces al disparar y podían manejar igual dos armas. Sin embargo, su rango de disparo era muy limitado y cuando había muchos enemigos en pantalla, se presentaban los problemas.
En cambio, Bob y Cormano (este último, tipo mexicano), usaban rifles, que lógico, mucho más lentos, pero cuando disparabas, sus balas se expandían y podían alcanzar mucho más enemigos.
Con respecto a las armas, podías hacerlas subir de nivel, con las insignias de plata y de oro. La primera te permitía disparar en automático y con doble arma, mientras la segunda, hacía mucho más rápido el disparo en el caso de los gatilleros, y en el caso de los fusileros, mucho más expansiva el arma.
Claro, al morir, perdías la habilidad y volvías a tus estatus anteriores. La forma de "muerte" era por los meros disparos, explosiones o caídas. Los enemigos no te lastimaban, salvo aquellos que llevaban armas blancas.
Aparte de esto, tenías la habilidad de saltar hacia lugares más altos o de deslizarte para moverte a mayor velocidad o evitar ataques o disparos.
En cuanto a los escenarios, eran divertidos, variopinntos y con una música digna del mismo Konami. El primer escenario era en el tipico pueblo vaquero, el segundo abordas un caballo y vas atacando un tren, el tercero llegas a otro pueblo, donde te vas balanceando entre las diferentes casas para evitar ser herido. El cuarto es curioso, porque involucra solo la cantina y la lucha contra el enemigo, el quinto vas sobre ya un tren, el sexto subes por las montañas para llegar a una tribu india y finalmente, el septimo es atacar un fuerte, defendido por los esbirros del jefe final: Sir Richard Rose.
Y hablando de jefes, eran igualmente pintorescos. El primero es un simple gatillero gordo. El segundo es también un forajido, pero mucho más agil. El tercero es original, es un llanero que a bordo de su caballo, trata de dispararte. El cuarto, como dije, es en la cantina y son dos hermanos gemelos, los Smith, que te van lanzando bombas y otras cosas de artillería. El Quinto es un mexicano, el Greco, que tiene un escudo y un látigo, así que debes saltar de un sitio a otro para evitar ser alcanzando. El sexto es el jefe más díficil, un apache indio que te lanza cuchillos y si te quieres acercar, te ataca sin piedad. El septimo escenario, involucra a Paco Loco, otro mexicano que no para de dispararte con su carabina y claro, llegas con Sir Richard Rose, que es medio tramposo.
Como ven, el juego es bastante bueno, original y aparte muy cliche. Esto último le da un aire mucho más pasable y que aparte uno va reconociendo guiños a las pelis de forajidos o del Viejo Oeste. En la versión que Konami saco para el SNES, se podía jugar hasta con 4 jugadores (claro, teniendo el adaptador multiplayer), emulando un poco el Arcade, donde igual podías juntarte con los cuates y ponerse todos a dispararle a los malos.
Otro punto a resaltar es la música. Tecnicamente, la rola del primer escenario ha servido de base para muchos remixes. En especial hay uno que saque de Ocremix, donde el autor mezcla esta rola con la "Cucaracha" y ciertas rolas dignas de Ennio Morricone.
Algo sobresaliente de un juego de SNES, para ser de sus primeros años, fue el pasar ciertas voces al juego. Los enemigos, en especial los jefes, usan frases para arrendarnos a pelear o para cuando perdieron. Destaca de sobremanera, como algunos sueltan dialogos en español bastante entendibles. Esto aunado a los gráficos y la movilidad, que era bastante buena, hizo de Sunset Riders, un juego altamente disfrutable.
Para quienes gustan jugar videojuegos antiguos o roms de SNES, este es un juego bastante recomendable, con una buena dificultad (que podía ser "cambiada" al inicio) y muy divertido.
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Saludos a mi princesa :3, así quienes gustan de los buenos juegos antiguos.
con los emuladores mame podrías jugar un rom idéntico al de la versión de arca de.
ResponderBorrareste juego tambien lo recuerdo con cariño y en efecto era muy difícil pasar al indio
¿nunca jugaste capitán comando? ese juego era mi favorita del estilo brawler y en segundo lugar turtles in time de la saga tortugas ninja
ah!! yo lo jugaba en la infancia!! en las maquinitas de la tiendita.
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